
El zarangollo, un plato tradicional de Murcia, es una deliciosa combinación de ingredientes simples que se transforma en un manjar irresistible. Imaginad una mañana soleada en la región de Murcia, el aroma a hierbas frescas flotan en el aire mientras los agricultores recogen calabazas maduras y cebollas aromáticas. Estos son los ingredientes principales del zarangollo, un plato humilde pero lleno de sabor que celebra la esencia misma de la cocina murciana.
Un viaje culinario por los sabores de Murcia
El zarangollo es más que una simple receta; es un viaje a través de las tradiciones culinarias de Murcia. Se cree que su origen se remonta a la época árabe, cuando la calabaza y las cebollas eran ingredientes básicos en la dieta de la región. Con el tiempo, la receta ha evolucionado, incorporando huevos frescos, ajo, aceite de oliva virgen extra y un toque de sal.
A diferencia de otros platos de verduras que pueden resultar pesados o aburridos, el zarangollo es sorprendentemente ligero y refrescante. La textura suave de la calabaza se combina a la perfección con la textura crujiente del huevo batido, creando una sinfonía de sabores en cada bocado. El ajo aporta un toque picante, mientras que el aceite de oliva virgen extra le da un carácter rico y aromático.
Desgranando el zarangollo: ingredientes y preparación
Para preparar este plato tan versátil, se necesitan pocos ingredientes:
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Calabaza: Es importante elegir una calabaza joven y tierna, con la piel lisa y brillante. La variedad “calabacín” es la más utilizada para el zarangollo debido a su dulzura y textura suave.
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Cebollas: Se prefieren cebollas blancas o amarillas, con un sabor suave y dulce.
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Huevos: Los huevos frescos aportan una cremosidad única al plato.
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Ajo: Una pizca de ajo picado añadirá un toque picante a la preparación.
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Aceite de oliva virgen extra: El aceite de oliva es esencial para realzar el sabor de los ingredientes.
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Sal: Al gusto.
Preparación:
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Lavar y cortar la calabaza en rodajas finas.
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Pelar y picar las cebollas.
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En una sartén amplia, calentar abundante aceite de oliva virgen extra a fuego medio.
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Agregar las cebollas picadas y cocinar hasta que estén transparentes y ligeramente doradas.
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Incorporar las rodajas de calabaza y cocinar durante unos 5-7 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que estén tiernas.
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Batir los huevos en un bol aparte con un poco de sal.
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Agregar los huevos batidos a la sartén junto con el ajo picado. Cocinar a fuego lento durante unos 3-4 minutos, o hasta que los huevos se cuajen ligeramente pero aún queden cremosos.
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Servir caliente inmediatamente, acompañado de pan crujiente para mojar en la deliciosa salsa del zarangollo.
Zarangollo: un plato versátil y adaptable
El encanto del zarangollo radica en su versatilidad. Se puede servir como aperitivo, plato principal o incluso guarnición. Algunas opciones deliciosas incluyen:
- Zarangollo con pimentón: Agregar una pizca de pimentón dulce a la sartén al final de la cocción le dará un toque ahumado y ligeramente picante.
- Zarangollo con chorizo: Incorporar pequeños trozos de chorizo durante la cocción añadirá un sabor intenso y salado.
- Zarangollo con queso feta: Espolvorear queso feta desmenuzado sobre el zarangollo justo antes de servir le dará una textura cremosa y un sabor ligeramente ácido que contrastará a la perfección con la dulzura de la calabaza.
Un plato para compartir
El zarangollo es ideal para compartir en familia o entre amigos, ya que su preparación es sencilla y rápida. Además, se puede adaptar a los gustos de cada comensal agregando diferentes ingredientes como tomates cherry, pimiento rojo asado o incluso espinacas frescas.
En resumen, el zarangollo es un plato humilde pero lleno de sabor que representa la esencia misma de la cocina murciana. Su combinación de ingredientes simples y su textura única lo convierten en una opción ideal para cualquier ocasión. ¡Anímate a probarlo y descubrir por qué este plato tradicional se ha ganado un lugar especial en los corazones de los murcianos!
Ingrediente | Cantidad |
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Calabaza (tipo calabacín) | 500 g |
Cebollas | 2 unidades |
Huevos | 4 unidades |
Ajo | 1 diente |
Aceite de oliva virgen extra | Al gusto |
Paso | Descripción | Tiempo aproximado |
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Cortar la calabaza en rodajas finas | 5 minutos | |
Picar las cebollas | 3 minutos | |
Calentar el aceite de oliva en una sartén amplia | 2-3 minutos | |
Saltear las cebollas hasta que estén transparentes | 5 minutos |
| Agregar la calabaza a la sartén y cocinar hasta que esté tierna | | 7-10 minutos | | Batir los huevos con un poco de sal | | 2 minutos | | Agregar los huevos batidos y el ajo picado a la sartén | | 3-4 minutos |